Archivos para julio, 2012

Ciencia y Guerra

Publicado: 29 julio, 2012 en PSICOLOGÍA
Etiquetas:, ,

La aplicación bélica de los avances científicos son de larga data y desde entonces se han buscado sujetos cada vez mas eficientes para cumplir sus objetivos, es decir, contar con la mejor calidad de elementos en todos los sentidos, tanto en ataque como en defensa y a la vez usar dichos adelantos para contrarrestar al enemigo, torturarlo o neutralizarlo. Las guerras antiguas se basaban en cantidad de hombres y a mayor capacitación de estos mayor probabilidad de vencer, pero los jefes necesitaban ahorrar recursos y la tecnología fue desplazando de a pocos a los ejércitos humanos por armamento creado. Dando un gran salto histórico y situándonos en un punto temporalmente cercano, durante la Primera Guerra Mundial el numero de bajas superó los diez millones de personas, sin contar los heridos, mutilados, discapacitados de por vida además de las consecuencias que se produjeron en el psiquismo de quienes participaron, así como de las victimas civiles. Los estados conocedores de  esa barbarie, intentaron de forma ilusa proscribir la guerra e implantar la paz; un hecho marca esta época de aspiraciones pacifistas: la creación de la Sociedad de las Naciones por el Tratado d e Versalles de 1919, basado en principios de cooperación, arbitraje de conflictos y seguridad. Serán las ideas del presidente estadounidense  Woodrow Wilson las que imperen este organismo. Pero esta institución estaba destinada al fracaso por una serie de errores políticos, como fue excluir a los países perdedores de la Primera Conflagración, a la Unión Soviética por no seguir el mismo modelo económico-social, asimismo  los países vencedores no acataban las resoluciones emitidas por la Sociedad de naciones y finalmente el estallido de la Segunda Guerra Mundial.

Nuevamente la maquinaria mortal  de las potencias buscaban como no obtener victorias pírricas, ya era posible superar la guerra de trincheras, que se suscito en la Primera Guerra Mundial y era un obstáculo que impedía el avance por el peligro de acabar en una segura la masacre de la tropa, la solución la hallaron con la fuerza aérea, tecnología desarrollada principalmente por la Alemania Nazi.

Los nazis necesitaban un ejercito perfecto  (para el futuro instituyeron políticas de eugenesia) que sea capaz de desempeñarse de forma impecable en todos los terrenos, la Holocaust Encyclopedia de Estados Unidos[1], narra en el articulo “Los experimentos nazis”, como estos buscaban mejorar a su ejecito y dividieron las investigaciones en tres grupos:

Mejoramiento de la supervivencia del personal militar, en especial de la Fuerza Aérea, se experimento con la resistencia a la altura, que reproducía las condiciones adversas que podría pasar un piloto alemán al ser eyectado de su avión y que estaría a grandes alturas y bajas temperaturas en caída libre, para ello utilizaban prisioneros llevándolos cuartos presurizados, herméticamente sellados y con una presión similar a la de vuelo y las grandes alturas sin oxigeno, como es lógico muchos fallecieron.

De otra parte  frente a las bajas en Rusia victimas de hipotermia, se optó por congelar  prisioneros en tinas de agua con hielo y luego se intentaba revivirlos por diversos medios. Finalmente, se trato de resolver el problema que tenían en la supervivencia  de los soldados bebiendo únicamente agua mar, en este caso a los prisioneros se les hacia consumir agua salada para medir su grado de resistencia y nuevas formulas de desalinización sin probar alimento alguno. Estos datos son los más resaltantes en lo que respecta al problema de los estados en conflicto de obtener un ejército con soldados superiores, es probable que a la par lo hayan realizado otros gobiernos.

La Segunda Guerra Mundial fue más funesta que su antecesora (se calcula cuarenta millones de bajas), repercutió en el cambio del orden mundial, en el deceso de la Sociedad de Naciones y posterior nacimiento de las Naciones Unidas además de los cambios institucionales que se fueron presentando.

La historia demuestra que la idea de la paz estaba lejos de hacerse real y todo lo contrario, nuevamente la carrera armamentista se reforzaba; durante la Guerra Fría es de conocimiento publico la continuidad de experimentación especialmente con soldados como sujetos de muestra para experimentos de resistencia y generalmente sin conocimiento del individuo.

En los últimos años la desclasificación del Proyecto 112[2], muestra las pruebas que se hacían en soldados con el incapacitante BZ o el alucinógeno LSD, así como otros compuestos químicos para probar antídotos y medir su potencial destructivo, todo como un plan orquestado por la Agencia Central de Inteligencia (CIA) y el Ejército de Estados Unidos.

De acuerdo a lo publicado, se calcula que entre 1955 y 1975 (plena Guerra Fría) en los cuarteles de Edgewood Arsenal (Maryland, EEUU) se sometió sin consentimiento a aproximadamente 7,800 soldados y cuyas consecuencias generalmente se dieron en la afectación del Sistema Nervioso Central, como inicios de Parkinson.

A inicios del año 2012 varios grupos de veteranos denunciaron ese atentado  a su integridad, que formaba parte del proyecto aprobado durante el régimen de John F. Kennedy y que a la fecha los soldados expuestos desconocen exactamente que tipo de experimentación fue llevada a cabo con ellos.

Se podría mencionar también los experimentos realizados para medir el alcance de privación del sueño o armas químicas, como las realizadas por el Ejército nipón con el  Escuadrón 731 a mediados del siglo XX o últimamente la masificación de la tortura psicológica para obtener información, como con el centro de detención mas mediatizado, Guantánamo y se podrían enumerar casos pasados y presentes de políticas de estado secretas con la finalidad la utilización del hombre como sujeto de experimentación. Está documentado las constantes intenciones y acciones de algunos ejércitos de experimentar con su propia tropa, cuando no era posible hacerlo  con prisioneros a forma de tortura y por ello se firmaron innumerables convenios y tratados, se refuerza la presencia del derecho internacional humanitario.

Pero en los últimos tiempos, gracias a los tratados existentes , experimentar de esa forma es ilegal y conlleva a una serie de sanciones, por lo tanto el negocio de la guerra ha necesitado sofisticarse para no aparentar brutalidad, porque los medios masivos de comunicación difundirían de inmediato las masacres (por ejemplo la Misión Hierro Fundido contra población civil palestina), el actual negocio de la guerra ha puesto en la mira a los nuevos avances en neurología, que se suponen tienen la finalidad de evitar trastornos o curar enfermedades degenerativas para el bien de la humanidad. Estos avances podrían modificar muchos conceptos en la vida diaria del hombre, la información que se obtiene a diario abarca todas las áreas en las cuales se desarrolla, considerando que la materia de estudio es el cerebro humano, el centro donde empieza la realidad de todos los individuos.


[1] UNITED STATES HOLOCAUST MEMORIAL MUSEUM. “Nazi Medical Experiments”. En: Holocaust Encyclopedia,  11 de Mayo de 2011, Washington: http://www.ushmm.org/wlc/en/article.php?ModuleId=10005168 (Consultado: 24 de junio 2012).

[2] DE MARTOS, Cristina. “Los soldados utilizados como ‘conejillos de indias’ denuncian al Gobierno de EEUU”,  2 de Marzo de 2012, Madrid: http://www.elmundo.es/elmundosalud/2012/03/02/noticias/1330696216.html (Consultado: 30 de junio 2012).